jueves, 22 de agosto de 2013

Besos

El mejor momento en un beso es, sin duda, el principio, ese justo instante en el que se rozan los labios. En el que se buscan desesperadamente.
¿Recordáis vuestro primer beso? Quién no, yo sinceramente considero que es uno de esos momentos en los que tienes más miedo que deseo, y que no sabes si se parecerá o no a lo que siempre has soñado.
Te preguntas si será la persona adecuada, si será el momento adecuado, si estarás preparado, si te gustará, si lo harás mal, si lo harás bien, si durará poco, si durará mucho, si le abrazarás, si os separaréis... Mil cuestiones aparecen en tu mente, mil dudas que desaparecen con ese roce de labios, porque comprendes que pase lo que pase, será perfecto y único.
No es el único momento en el que las dudas te invaden, en el que no paras de pensar que no deberías hacerlo. La vida, en el fondo, siempre te lanza las mismas piedras, tanto en las amistades como en el amor.
Ya se que puedo ser un poco pesada con el tema sentimental, pero es que es algo que todavía me desconcierta, cada persona es un mundo, y no hay luz sin oscuridad, ¿no?
Nadie, absolutamente nadie, será tu alma gemela, porque habrá algo que te moleste de ella y que tendrás que aguantar durante tu vida, pero valdrá la pena.
Y, como último comentario sobre los besos, solo digo que es algo tan especial que no debería malgastarse a la primera de cambio, porque en el fondo, entregas algo de ti en cada beso.


No hay comentarios:

Publicar un comentario